miércoles, 25 de junio de 2014

VACACIONES

Las vacaciones surgen cuando se deja de trabajar para descansar. Es un tiempo limitado y, en la empresa, remunerado.
Vacación es pues, sinónimo de descanso o tal vez descanso-ocio. Pero, si el ocio es no trabajar aquí podríamos incluir desde "cruzarse los brazos" igual a no hacer nada, hasta "fiesta" signo esto de alegría y diversión pasando por formas muy plausibles como "jubilación" - descanso por edad y por haber trabajado antes - o detestables como llenarse de "pereza". Al que le pasa esto último le llamamos "holgazán" o comparativamente con el mundo animal diríamos que es un "zángano". ¡cuidado con  el ocio! Conocida es la frase: "La ociosidad es la madre de todos los vicios".
Las vacaciones son esperadas, deseadas y para el trabajador honrado, merecidas.
Las hay fijas como las correspondientes a la enseñanza tanto por parte de los que la imparten como los que la reciben; los padres o tutores de los alumnos saben también de antemano cuando sus hijos descansan.
Hubo un  tiempo, no hace mucho, que el trabajador de empresa prefería cobrar  a disfrutar de sus vacaciones. Suponía una entrada extra en su economía. El concepto de descanso no estaba concebido como "animación" o "recuperación de fuerzas".
Mas tarde, algunas empresas europeas exigieron a sus trabajadores este disfrute y, curiosamente se obtuvo un mayor rendimiento al regreso del período vacacional,.
Las vacaciones rompen la rutina, relajan cuerpo y mente, acercan la vida familiar, contribuyen y potencian las fiestas populares, dan conocimiento de otros lugares cuando se opta por los desplazamientos, ayuda a conocer de cerca otras actividades y costumbres, sirven para cumplir compromisos o promesas con amigos y favorecen el encuentro intergeneracional.
Pero esta ruptura que hacemos de nuestro horario habitual no debe llevarnos al alejamiento de todas las normas de convivencia éticas y morales. No caben vacaciones desenfrenadas o alocadas. El buen comportamiento en la diversión habla también del buen hacer de la persona.
Ahora los estudiantes terminaron sus clases; a cada uno de ellos y, a los que puedan  tener o ir de  vacaciones con este verbo de doble juego digo: ¡PASALO BIEN Y ...NO TE PASES!! Tú, amigo/a tienes la medida curiosa de esto.

martes, 17 de junio de 2014

Santa Marta de Ortigueira: su eslogan

Desde tiempos antiguos, los pueblos tienen frases identificativas que, podríamos colocar entre  los eslogans de hoy y los refranes de siempre.
De la villa de Santa Marta de Ortigueira había uno que decía: Santa Marta / vila farta.
Así, en galego.Si pretendemos traducirlo pasa, como en la mayoría de los idiomas que, pierde  su enfoque, su fuerza, su gracia. Los que la visitaban marchaban satisfechos del buen recibimiento, la atención, la disponibilidad de sus gentes para dispensar cualquier información y la abundancia en la mesa cuando invitaban.
Allá por los años 60 se hizo una especie de concurso para promocionar todos y cada uno de los pueblos de Galicia. Estos tenían que "inventar" en una frase corta, concisa, todo el atractivo que tenía el pueblo. Su fin era, darlo a conocer. Que la frase se retuviera con facilidad, era esencial. Pasaría  a ser su "slogan" ( hoy eslogan).Los hubo muy buenos. Por citar alguno diré el de A Coruña:" Coruña, ciudad en que nadie es forastero"; o el de Lugo: "Y para comer, Lugo".
De la costa gallega, tan distinta de la del resto de España, se dice que  Dios posó en ella su mano y creó las rías. Es una forma simbólica de reconocer la belleza de este paisaje litoral.
La ría de Santa Marta, es maravillosa. Una de sus curiosidades reside en la diferencia notoria que le dan sus mareas. Si usted visita la villa y coincide su paseo por el muelle de marea alta, se encontrará con la dificultad de saber por donde entró el agua de la mar. Parece realmente un  lago. Le aconsejo espere la bajamar y, cual " milagro astronómico" el magnífico lago de entonces ha desaparecido dejando ahora ver, el discurrir silencioso y apacible de dos de los ríos -Mera y Rio-Mayor-  que forman la ría
Su nombre es el de la Patrona del pueblo, Santa Marta ( se celebra el 29 de julio), aquella mujer de  la aldea de Betania que hospedó a Nuestro Señor Jesucristo y que, sigue transmitiendo a sus gentes esa acogida de la que hablaba al principio.
La villa de Santa Marta de Ortigueira, cantada por Lope de Vega, es una Ría Alta y, tan bonita como una perla. De ahí su eslogan: ORTIGUEIRA, PERLA DE LAS RIAS ALTAS.  

viernes, 13 de junio de 2014

Uso de razón

Recibir a Cristo se llama Comulgar. Comunión es una unión espiritual de todos aquellos que participan en esa ceremonia o acto de recibir a Jesucristo. Viene dada por que todos ellos tienen una misma fe, una misma creencia.
Comunión es equivalente a Eucaristía, Acción de Gracias, Cena del Señor o antiguamente Fracción del Pan. Es el centro de la liturgia y de la vida de la Iglesia Católica. Todo esto, desde la Última Cena que celebró Nuestro Señor Jesucristo con sus Apóstoles en tiempos de Poncio Pilato.
Los niños/as se preparan para recibir este Sacramento, debiendo ser instruidos con los conocimientos necesarios para saber que, es Dios  el que viene a ellos bajo las apariencias de pan y de vino¡. Todo un  misterio de nuestra fe!!.
¿Cuándo es el momento de recibir  este Sacramento? Cuando empiezan a ser responsables de sus actos, por que razonan. El razonar, nos separa del resto de los animales, o dicho de otra forma, es una de las cosas que nos distingue como personas.
Razón es sinónimo de inteligencia, de tener capacidad de pensar, de discurrir, etc... y esto suele suceder al final de la infancia.
Había en los catecismos de mediados del siglo pasado una expresión muy curiosa y  significativa de  este momento que se consideraba propicio para acercarse a Comulgar por primera vez. Decía:
"tener uso de razón".
Empieza a usarse la razón según el grado de madurez del niño/a; a su vez la madurez depende, no sólo de la inteligencia sino de los medios y circunstancias que rodean al infante.
Razonando, sabrá distinguir el bien del mal: querer o despreciar; perdonar u ofender; mentir o decir la verdad, etc.
La Primera Comunión es una fiesta espiritual celebrada solemnemente y, como tal va acompañada de esa fiesta material, tangible: vestido nuevo, zapatos... que estén mis papás, hermanos, abuelos,...y mis amigos.
Antes los vestidos de las niñas, tenían todos una bolsita que colgaba de la cintura.En ella se metían los recordatorios, estampas con la fecha y el nombre de la iglesia  en la que se  recibía la Comunión y que se repartían cuando los vecinos saludaban. A cambio, daban unas monedas. De ahí el curioso nombre de la bolsita:Limosnera.
En algunos lugares se conserva la frase: ¡Va de Primera Comunión ! para indicar que va impoluto, sin mancha, con el mejor vestido que tiene.
¡Qué gran día  el de la Primera Comunión!! Para recordarlo toda la vida.