lunes, 29 de noviembre de 2021

Felicidad, respeto...¿Quién enseña y manda en casa?

Cuántas veces llevé con mi mano, una mano pequeñita para darle la satisfacción de que ya sabe poner (o hacer) la letra con que escribirá mamá. Estas pequeñas cosas hace unos años, era mi vida diaria. ¡Mucha actividad distinta para estar felices ambas partes: niño/profesora!

Enseñar, ayudar, animar, dar consuelo en la familia y en su prolongación que bien puede ser el cole, la casa de los abuelos, la catequesis, etc., etc. Es una tarea de esfuerzo pero muy gratificante. 

Tendemos a ser felices. ¡Feliz el niño que es entendido en su casa! Pero su familia como toda sociedad-grande o pequeña-tiene unas normas que todos y cada uno de sus componentes deben respetar para llegar a tener felicidad.

Los niños son felices dentro de la familia cuando las normas, mandatos, reglas...cumplen esa doble función de dar libertad con respeto, sin disminuir la autoridad. De esta manera se expresarán los sentimientos de tal forma que los hijos cuentan a sus progenitores las alegrías y dificultades que tienen; revelan instantáneamente sus gustos y con esa misma libertad-respeto darán un abrazo antes de dormir esperando la bendición, el beso o la caricia que conforta.

También con esa libertad, respetarán los tiempos y tendrá lugar el reconocimiento de equivocaciones. Pero para llegar a esto, los padres son los que después de escuchar, tendrán la última palabra en las decisiones y enseñarán, sin consentir caprichos, pues los niños necesitan ser corregidos, no despreciados, y siempre, siempre queridos.

 Educa al muchacho al comienzo de su camino,

 que luego de viejo, no se apartará de él (Pr 22.6)

Estas enseñanzas paternas, muchas veces forman parte de las propias tradiciones familiares que se transmiten de forma oral y práctica y dan satisfacción de pertenencia.

Con todo esto, los hijos se sentirán  protegidos, cómodos y felices porque siempre sabrán quien manda en su casa con amor.

¿Puedes creer que también el humor dentro de una familia se apoya también en esa libertad-respeto y ese cumplimiento de normas éticas y morales de la mano de quien manda?

Son pues los padres los que nos encienden "la luz" de la esperanza, del amor, de la tolerancia...y con ella nos enseñan a soportar y afrontar con valentía los momentos difíciles de la vida. En esto estriba, poder conseguir la felicidad en todo momento.

Muchas más cosas valiosas -llamamos valores- principian en nuestra familia y no se compran en ningún lugar y...¡Cuidadito no las perdamos! Pues, como decía Pablo de Tarso a los Corintios, se llevan  en vasijas de  barro. 


Las personas transmitimos a la sociedad los valores por/con nuestro comportamiento diario.

martes, 9 de noviembre de 2021

Los Crisantemos

A mi me encantan las flores. Es algo bello que nos ofrece la naturaleza a lo largo del año. Pensar en las flores es pensar en colores y en olores. Luego viene el porque de poner flores en determinados sitios o en entregar flores con un significado especial, o en lucir flores en ciertos actos sociales, o regalar...

Decimos en España que mayo es el mes de las flores porque es la explosión de la primavera. Ahora estamos en noviembre y este mes que es el de las castañas, tiene su flor propia, el crisantemo. Es esta una planta  anual y que florece ahora, parece morir en verano, para luego brotar de nuevo en noviembre. Como este mes empieza con la fiesta de Todos los Santos y de los Fieles Difuntos y se visitan los cementerios recordando con cariño a los familiares que terminaron su estancia en este mundo, se ponen en las tumbas estas hermosas flores quedando los Camposantos llenos de colorido.

Y es que los crisantemos pueden tener las flores amarillas, rojas, blancas y también las hay rosas, naranjas o de color malva e incluso una misma flor puede tener dos colores

                                                                                    Es el crisantemo la flor que alegra el otoño y el

invierno y recuerda en nuestras mentes la esperanza de la nueva Vida hacia la que vamos peregrinando y en la que ya se encuentran  esa "inmensa muchedumbre que nadie podría contar, de toda nación, razas, pueblos y lenguas... y llega triunfante hasta el trono de Dios" que leemos en Apocalipsis (Jn 7,9-10)

 Son los Santos que tal vez conocimos porque formaron parte de nuestra familia, nuestro vecindario, fueron amigos o quizás nos enseñaron con paciencia y mucho amor lo que debíamos hacer y nos acompañaron muchos años.

Y es que estas solemnidades -Santos y Difuntos- tocan con anhelos profundos nuestra sensibilidad
 y viene a la memoria lo que les gustaba, como nos decían...Es tiempo de agradecerles todo lo bueno que nos dejaron.
Yo creo tener muchos Santos en ese Cielo de                                                                                                                                                                                                            Nuestro Señor. Y esto no es un razonamiento                                                                                          pueril, es fruto de fe y que da paz y felicidad.
Al hacer el ramo con bellos y frescos crisantemos, la imaginación se llena de serena alegría pensando en ese o esos familiares que nos esperan en la Gloria Celestial.





La forma de las flores también es variada pero todas ellas muy hermosas. Aquí las vemos. 

 


El crisantemo también se llaman "flor de oro", en China "cielo repleto de estrellas" y en un cuento alemán "flor de Cristo".