Pimientos asados

Cuando se recoge la cosecha de los pimientos morrones, esos pimientos verdes, rojos o anaranjados, es el momento de surtirnos haciendo una compra abundante y poniéndolos en conserva, pues en la mesa darán un toque de sabor y también de color. Meterse en la cocina es buen momento para conseguir que nos duren, tal vez todo el año.
Asar los pimientos no es cosa dificil, tal vez un tanto laboriosa, como sucede con otros platos a los que etiquetamos calificando sólo su dificultad .Vamos a empezar diciendo que al comprar los pimientos debemos tener en cuenta que su piel esté brillante, tersa, pues esto habla de su frescura.

Ahora comenzamos a preparar todo lo necesario para asar los pimientos y los botes para guardarlos y conservarlos.Qué necesitamos?Veamos:
Un poco de aceite de oliva
Una pizca de sal
Dientes de ajo
Unas ramitas secas de romero
Y los utensilios serán:
Unos botes de cristal y sus tapas correspondientes
Una olla grande con cabida para poder hervir los botes y sus tapas
Un cuchillo de cocina pequeño y,
De forma opcional, un paño de cocina mejor blanco.

Ponemos en la olla los frascos limpios y la llenamos de agua hasta que los cubra totalmente, y metemos también las tapas y ponemos a hervir durante 45 min.
Mientras se esterilizan los frascos, una vez lavados los pimientos, los cortamos haciendo una incisión alrededor del rabillo  de forma que tiramos de éste y sale con las pepitas; ahora los abrimos a la mitad (si son muy grandes en 4 partes) cortándoles también esas membranas blancas en las que se prenden las semillas( no deben quedar ninguna) y se van colocando uno a uno con el corte hacia abajo en la bandeja del horno que estará con un poquitín de aceite de oliva.Ya puestos, espolvoreamos con sal y echamos por encima un chorro fino de aceite y ¡listos para meter al horno! que tendremos precalentado durante 10 min, a 200º arriba-abajo.Horneamos durante 30 ó 40 min, según el tamaño de los pimientos.Es aconsejable que queden un poquitín duros.Se apaga el horno y se tapan los pimientos con un paño (o papel de aluminio) hasta que estén templados.Ya podemos empezar a pelarlos.Veremos que han soltado un poco de jugo que luego utilizaremos;ahora es el momento de envasarlos así que, tendremos los botes ya esterilizados y listos para rellenar.Vamos metiendo los pimientos de forma que queden bien colocados y sin huecos llenando los frascos hasta dejar un dedo aproximadamente del borde.Vertemos un poco del jugo que soltaron, añadimos un diente de ajo y una ramita seca de romero y terminamos de llenar con aceite de oliva .Tapamos los frascos y cerramos bien.Ahora sólo queda envasarlos al vacío y para ello volvemos a meter los frascos otra vez en la olla y volvemos a llenar de agua que los cubra y contaremos 20 min desde que hierva y luego dejamos enfriar dentro del agua. Ya están.

Si se guardan en el congelador no necesitan esa segunda cocción.
¿Para qué queríamos el paño? Curiosamente para poner en el fondo de la olla y así no harán ruido los frascos al hervir.
Listos para guardar en sitio fresco y para comer cuando se quiera demostrar nuestras cualidades culinarias.
¡Buen provecho!