jueves, 13 de mayo de 2021

Un plato de calabacín: parecen flores

El calabacín es un tipo de calabaza de forma cilíndrica que comemos cuando está todavía verde, tierna. Es pues una hortaliza que crece de forma horizontal , de las que llamamos rastrera. Tiene unas flores grandes, amarillas. Procede de tierras mexicanas, valle de Oaxaca, donde al parecer ya se encontraba muchos años antes de Cristo.
Con este fruto del campo podemos hacer apetitosos y variados platos que adornarán nuestras mesas al mismo tiempo que nos aportan nutrientes.
Vamos a presentar el calabacín como flores. Ingredientes:
1 calabacín de medio kilo más o menos
1 cebolla pequeña
2 patatas medianas
2 cucharadas soperas  rasas de harina de trigo
 3 huevos
1 diente de ajo
aceitunas negras sin hueso o tomates cherry
pimienta (opcional)
aceite de oliva 0,4 acid.
sal
Usaremos: Un cuenco, rallador, pelador, escurridor, tenedores, sartén, espumadera, tenedor o cuchara de madera, fuente o bandeja de mesa, cuchara grande y cuchillo.


      Su elaboración es fácil:
Lavamos el calabacín y lo pelamos a tiras es decir dejándolo como si fuera a listas verdes y blancas. Luego lo rallamos de forma que quede como fideos gruesos y lo ponemos en el escurridor a la espera de los siguientes ingredientes. Rallamos la cebolla más fina y lo mismo hacemos con la patata (esta puede ir como el calabacín).Juntamos los 3 ingredientes en el cuenco y añadimos los huevos batidos y un poco de sal (pimienta opcional).Mezclamos todo con dos tenedores, uno en cada mano, hasta que todo quede mojado por los huevos y espolvoreamos la harina sobre esta mezcla removiendo para que se forme una masa suave (no puede quedar dura). Ahora cortamos los tomates por la mitad o picamos en trocitos pequeños las aceitunas negras; en plato aparte, picamos el diente de ajo en láminas. Y, a empezar:
Ponemos una sartén mediana al fuego con  abundante aceite y echamos el ajo laminado hasta que se dore; retiramos el ajo pues curiosamente lo hemos frito para dar sabor. A continuación empezamos a freír llenando la cuchara y vertiéndola (la ponemos en vertical, punta abajo) haciendo un montoncito que aplastaremos un poquitín con la misma cuchara. Recomiendo no echar más de 3 pues hay que darles la vuelta pronto y, para ello, usaremos cuchara o tenedor de madera y espumadera pues son blanditas y dejaremos dorar por ese otro lado. Las sacaremos también con la espumadera  y las vamos colocando en la fuente, sin apilar. Ahora daremos el toque final, poniendo en el centro de cada una, la mitad del tomate (ver foto).Podemos sustituirlo por las aceitunas negras y parecerán girasoles. Deja volar tu imaginación y descubre otras formas.
El calabacín parece tener muchas "virtudes" para la salud  pero sobre este tema sólo me atrevo a decir que es diurético, tiene mucha agua, vitaminas y...lo demás, ¡a consultar!.
El plato que ofrezco tiene una textura fina que gusta a paladares delicados, exquisitos y también a los niños.
¡Buen provecho! 


 

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